Ciertamente muchos quisiéramos saber como manejar nuestro temperamento en los momentos más tensos de nuestra vida, pues sin duda, solemos exaltarnos demasiado cuando estamos en una discusión acalorada, ya sea con nuestra pareja, familia, compañeros de trabajo, etc.
Para darnos una respuesta a esta gran incógnita, un grupo de psicólogos se ha tomado la tarea de explicarnos cómo podemos mantener la calma frente a las retahílas y discusiones que podamos tener con cualquier persona.
6 maneras infalibles para mantener la calma en todo momento
Mantén especial atención a tu cuerpo:
No en un aspecto narcisista, sino que sólo así te darás cuenta cuando estás a punto de llegar al límite de tu paciencia. El cuerpo tiende a tensarse en momentos incómodos o cuando se esta sumamente enojado, en cuanto notes este cambio corporal, trata de tomar una posición relajada y neutral. Estarás tan ocupado tratando de mantener la compostura de tu cuerpo que el tema de la discusión quedará olvidado.
Respira profundamente:
Frente a situaciones de estrés extremo, siempre es necesario respirar profundo y contar hasta 3, pues la respiración natural y pausada relaja al cerebro y por consiguiente al cuerpo. Poco a poco la tensión y el estrés irán desapareciendo, además, verás las cosas de otra perspectiva y sabrás resolver el asunto con mucha facilidad.
Escucha atentamente:
Una persona molesta no piensa con claridad, además, siente que nadie le presta atención ni escucha el motivo por el cual discute, entonces, si le presta suma atención sin interrumpir en ningún momento, podrás saber exactamente qué responder, sin necesidad de alterarte tu también. Por otro lado, tu respuesta será mucho más inteligente y menos demandante por la estabilidad emocional que te proporciona este método.
Asiente aunque no estés de acuerdo:
Hay ocasiones en las que simplemente es mejor aceptar lo que la persona diga sólo para evitar una discusión más grave y acalorada de lo que ya es. Luego, cuando todos estén calmados, da tu punto de vista, de manera neutral y con mucho tacto, de hecho, puedes hacer comparaciones entre las ideas de cada uno y enfatizar cual es más positiva o negativa.
Realiza preguntas abiertas:
Puede que sea un poco complicado, pero es la mejor manera de evitar un inconveniente verbal entre las personas. Un simple ¿Que?, ¿Como? o ¿Porque?, son necesarios para aligerar la tensión, pues no atacas directamente a una persona negándote a su petición o comentario y tienes más posibilidad de saber completamente el pensamiento del sujeto.
No eleves la voz:
Mientras una persona grite, la otra también querrá hacerlo para hacerse escuchar e imponer su voluntad. Lo peor de todo es que nadie que se exprese de esa manera logra sus objetivos. Lo ideal es mantener un tono de voz bajo y libre de emociones, así el sujeto sabrá que esta haciendo mal en elevar sus cuerdas vocales y se relajara un poco.
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